Palabras que gritan ser escuchadas
Palabras que odian ser ignoradas
Palabras que callan en mi mirada
Miradas que gritan por encontrar
Ojos que mueren por ser vistos
Lágrimas llorando por mirar
Gemidos que desean a tus oídos llegar
Confusión que acaba con mi razón
Razón que se extingue con esta canción
Canciones que alimentan un alma desnutrida
Un alma que acostumbrada a la felicidad
Se da cuenta que la vida es un jardín de rozas
Pero que en cada roza una espina va a encontrar


jueves, 9 de octubre de 2008

Ironia de la Ascension

Calmada las ganas después de un año o más de insistir, la rutina empieza pero todos sabemos que este día tendrá un distinto porvenir.

Con el reto de realizar la crónica en mente y reviviendo los sucesos de aquel día, lo impresionante y “triunfante” del trayecto y lo sorprendente de nuestra corta estadía en la Biblioteca España, y en conocimiento de algunas de las obras de mi compañeros quise primeramente expresar mi experiencia y crear un bello relato que exaltara lo que fue de mi agrado y lo que se quedo conmigo desde aquel día; pero luego después de repasar mentalmente cuales iban a ser la palabras que debían empezar este escrito me di cuneta de algo importante, reconocí el fuerte tinte irónico de toda esta actividad y de la realidad que ahora vivimos, así que decidí plasmar un tema completamente distinto y centrarme en la casi comedia de la que creo somos parte.

Quiero ser claro que lo que pretendo es realizar una exageración de los hechos y plasmar de forma satiresca una realidad del diario vivir, no pretendo ofender a nadie y simplemente este es un punto de vista descabellado y muy extremista del que no soy 100% partidario y simplemente quise tomarlo como base para esta crónica.

Lo que fue primero en ese día, fue igual para todos; ir a nuestra querida institución “Colegio Alemán” y digo querida porque de verdad cuando nombro mi colegio lo hago con orgullo y me vanaglorio de mi “parte” alemana y de lo superior de nuestra academia y lo hermoso de nuestro colegio; pero también pienso: cuando fue que traicionamos a nuestra patria? Desde cuando dejamos que otros países nos eduquen y nos entrenen para luego emigrar a estos y servirles con nuestra fuerza laborar? Y lo pero de todo es que lo hacemos gustosos y lo consideramos un orgullo y un símbolo de status social. Son acaso tan malas nuestras costumbres y nuestra vida en Colombia que no queremos que nuestra gente eduque a las jóvenes generaciones, sino que preferimos que estos mismos jóvenes crezcan pensando que lo bueno es lo de afuera, que es el extranjero donde debe la pena estudiar, trabajar y luchar. Todo quizás con una mentalidad que ayude a la globalización, la correcta y necesaria globalización, cual es el afán de unificar pensamientos, anular costumbres y homogenizar realidades? Si lo hermoso de las flores es que son distintas, si lo bello del arte es que es siempre cambiante!

Creo firmemente que si nuestros ancestros aborígenes hubieran mandado sus pequeños hijos a las tribus aledañas para que fueran instruidos en sus costumbres y trabajado en sus tierras no hubiera sido una acción de comprensión internacional o diplomacia; sino una vil traición y un rechazo a la propia cultura!

Puede que ahora no pelemos con lanzas y boleadoras pero para que debamos trabajar en tierras extranjeras y dar nuestra fuerza a países ajenos, mientras dejamos que la tierra que nos vio nacer se pudra y desintegre como un pedazo de materia fecal en la cañería. Es irónico que nos quejemos de la situación de nuestro país y que declamemos abiertamente que le ayudamos cuando solo vemos a Colombia como una fuente de dinero como un limón agrio de poco jugo, que exprimimos y exprimimos hasta secarlo, puede que no conciente pero lo que nos importa somos nosotros mismo, nuestra comodidad nuestro éxito y nuestro progreso y cuando hablamos de nuestro progreso hablamos de los temas que a nosotros conciernen, el metro cable por ejemplo es una obra del progreso colombiano y de ayuda a la ciudad, pero porque ni se nos pasa por la cabeza la situación de ciudades en el choco o que comen los campesinos en Sasaima; simplemente no nos interesa porque no pertenece a nuestro diario vivir y a la cercanía de nuestra voraz existencia.

Después de abordar el Metro otro de los grandes logros de nuestra ciudad que demuestra la ingeniería y brillantez del hombre y la gran capacidad de endeudamiento y corrupción de nuestro país, tras un rápido viaje llegamos a Acevedo; línea de transferencia K con destino final Santo Domingo.

Es muy curioso comos se haya conocido este lugar no por la gente que habita allí, ni por su magnifica vista sino por la construcción del metro cable y después la famosa biblioteca España.

Es impresionante la vista en el ascenso, las montañas, el rió, la altura, los techos de latón sostenidos con piedras, la ropa secándose en los patios y las antes sorprendidas ahora desinteresadas caras que se ven abajo a lo lejos de nuestros vagones de cristal.

Ironía es la palabra, subir a las comunas por cultura!, cultura que nos vienen a dar de nuevo repitiendo al historia los mismismos reyes de España!

Y nosotros aceptamos gustosos y orgullos la llama que alumbra nuestra cultura, jajá es simplemente ironía de la mas alta clase y gloria de la calaña real!!